lunes, 31 de octubre de 2016

El Juego de la Serpiente (Traffic Snake Game) llega a Brasil, de la mano de una arquitecta española



La Escuela Municipal Arquiteto Luís Saia (São Paulo, Brasil) sería la primera en aplicar el Traffic Snake Game, un juego creado en Bélgica por Mobiel 21 vzw, fuera del continente europeo. La propuesta empezó bajo el marco del proyecto internacional Global Road Safety de Bloomberg Philanthropies (en el que participan 10 ciudades en todo el mundo, entre ellas São Paulo) y el estudio contratato por WRI – World Resources Institute, “Movilidad en las escuelas de São Miguel Paulista, São Paulo”, realizado por  Irene Quintáns (arquitecta) y Alexandre Pelegi (matemático y técnico de movilidad). El deseo del centro escolar es continuar como proyecto pedagógico propio. 
 
A través de la geógrafa Marta Román, de Gea 21 - Punto FocalNacional de España para el Traffic Snake Game (El juego de la serpiente), la arquitecta Irene Quintáns está asesorando a la Escuela Municipal en la aplicación de la experiencia piloto del Juego. Irene fue idealizadora del proyecto Camino Escolar de Paraisópolis (São Paulo), vencedor del premio Mobilidade Minuto 2014 del IVM – Instituto Ciudad em Movimiento y es consultora de otros proyectos de movilidad urbana con niños y niñas en regiones de periferia y áreas vulnerables.


En el estudio de movilidad se detectó un grupo de alumnos de cuarto año (9 años de edad), cuyo uso del transporte escolar (70%) era mayor que la media de toda la escuela (40%). Por este motivo, dentro de la agenda de actividades sobre movilidad que serán desarrolladas en el centro escolar, se propuso a la profesora Rosângela Melo la actividad El Juego de la Serpiente (bautizado Jogo da Cobra por los alumnos brasileños).

El barrio donde se sitúa esta escuela, de 1200 alumnos, es el tercer polo económico de la ciudad pero una de las áreas más peligrosas de la ciudad en cuanto a seguridad vial. En el año 2014, la avenida Marechal Tito, que cruza el barrio y que está a pocos metros de la escuela, registró el mayor número de accidentes fatales de la ciudad. En este contexto, el uso del transporte escolar (“perua”) para los desplazamientos casa-escuela es bastante elevado en el primer ciclo de Enseñanza Fundamental (6 a 10 años). Decidimos adaptar las reglas del juego a esta realidad local, donde la infraestructura de movilidad y seguridad vial aún es complicada. 
 
El juego está siendo aplicado como piloto en un grupo de 30 alumnos, durante tres semanas, y serán considerados viajes sostenibles apenas los de movilidad activa (a pie y bicicleta), para incentivar las opciones más saludables. El transporte escolar es una solución mejor que el coche particular pero priva a los niños de un contacto directo con su barrio y sus las referencias urbanas.


Empezamos con 5 viajes a pie y al final de la primera semana se consiguió un aumento considerable, 9 viajes a pie; al final de la segunda semana el número de caminantes subió a 11.
Los niños y niñas están muy animados y cuentan a la profesora cómo sus padres aprovecharon para hacer más ejercicio físico y disfrutar de más tiempo en compañía de sus hijos. Han hecho dibujos de sus caminos hasta la escuela, registrado sus opiniones e intercambiado con otros amigos de la escuela la rica experiencia: “Quien no contamina hace un mundo mejor”.

Otras de las actividades realizadas ha sido una salida para evaluar las calles del entorno de la escuela. La actividad Curativos Urbanos y la aplicación del Kit Detector de Obstáculos (idealizado por la argentina Verónica Mansilla) trajeron, a través de acciones cuidadanas divertidas, una visión crítica sobre los deberes y derechos de los ciudadanos y el espacio público.

Saber que ellos son los primeros en Brasil provocó mucha sorpresa y los animó a ser un gran ejemplo, para que los demás niños y niñas de su escuela quieran adoptar a la Serpiente que cruzó el océano desde España para ayudarlos a tener una movilidad mejor.

FOTO 1-2-3_Irene Quintáns
FOTO 4 (Collage)_Irene Quintáns y Alexandre Pelegi